Liturgia - Lecturas del día

Lectura de la profecía de Zacarías 2, 5-9. 14-15a Yo levanté los ojos, y tuve una visión: Había un hombre que tenía en la mano una cuerda de medir. Entonces le pregunté: «¿A dónde vas?» Él me respondió: «Voy a medir Jerusalén, para ver cuánto tiene de ancho y cuánto de largo». Mientras el ángel que hablaba conmigo estaba allí, otro ángel le salió a su encuentro y le dijo: «Corre, habla a ese joven y dile: Jerusalén será una ciudad abierta por la gran cantidad de hombres y animales que habrá en ella. Yo seré para ella -oráculo del Señor- una muralla de fuego a su alrededor, y seré su Gloria en medio de ella» Grita de júbilo y alégrate, hija de Sión: porque Yo vengo a habitar en medio de ti -oráculo del Señor-. Aquel día, muchas naciones se unirán al Señor: ellas serán un pueblo para Él y habitarán en medio de ti. Palabra de Dios. Una invitación a la alegría. A buscar la verdadera alegría. Aquella que nace en Dios, mira a Dios y vuelve a Dios. ...