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Mostrando entradas de mayo 28, 2023

Los cinco minutos del Espíritu Santo

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Con el Espíritu Santo se derraman en nosotros sus dones más preciosos, que nos hacen más dóciles para seguir sus impulsos, para ser menos esclavos de lo que nos hace daño y dejarnos impulsar hacia las cosas buenas y bellas. Los siete dones son: sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios (Isaías 11,1-2). Si ya has recibido la Confirmación, sería bueno que renovaras la gracia de este Sacramento. Y si no lo has recibido, sería hermoso que lo pensaras. El rito es muy simple. Consiste en una unción con aceite perfumado (Crisma) que hace el Obispo en la frente, diciendo las siguientes palabras: " Recibe por esta señal el Don del Espíritu Santo ". Esta unción imprime como un sello permanente en el interior de la persona, y por eso sólo se recibe una vez. Pero una vez recibido, podemos invocar al Espíritu Santo, pedir perdón por nuestros pecados, alimentarnos con la lectura de la Biblia y con la Eucaristía, para que esa gracia de la Confirmación revi

Lecturas de hoy / sábado de la 8va semana del TO

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  Lectura del libro del Eclesiástico 51, 12-20a   ¡Señor, te daré gracias y te alabaré! Bendeciré el nombre del Señor. En mi juventud, antes de andar por el mundo, busqué abiertamente la sabiduría en la oración; a la entrada del Templo, pedí obtenerla y la seguiré buscando hasta el fin. Cuando floreció como un racimo que madura, mi corazón puso en ella su alegría; mi pie avanzó por el camino recto y desde mi juventud seguí sus huellas. Apenas le presté un poco de atención, la recibí y adquirí una gran enseñanza. Yo he progresado gracias a ella: al que me dio la sabiduría le daré la gloria. Porque resolví ponerla en práctica, tuve celo por el bien y no me avergonzaré de ello. Mi alma luchó para alcanzarla, fui minucioso en la práctica de la Ley, extendí mis manos hacia el cielo, y deploré lo que ignoraba de ella. Hacia ella dirigí mi alma, y, conservándome puro, la encontré.   Palabra de Dios. El sabio termina su obra invitando a imitarle en la búsqueda de la sabiduría para poder gozar

Los cinco minutos del Espíritu Santo

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" Espíritu Santo, una vez más te pido la gracia de liberarme, Señor. Derrama en mi un profundo deseo de perdonar, de vivir en paz con todos y de comprender profundamente las agresiones y desprecios de algunas personas. Ayúdame a descubrir sus sufrimientos y debilidades más hondas para poder mirarlos con ternura y no juzgarlos por lo que me han hecho. Limpia mi interior, Espíritu Santo, de todo resto de resentimiento y de malos recuerdos. Mi seguridad está en tu amor y en tu fuerza que me abraza. No permitas que me debilite con faltas de perdón. Arranca de mi interior todo deseo de hacerles daño y de pagarles con la misma moneda. Es posible reaccionar con el perdón y elevarse por encima de los resentimientos. Elévame, Espíritu Santo, para que yo no necesite hacerlos sufrir de alguna manera para sentirme bien. Derrama en mi interior tu compasión, para que pueda recordarlos sin rencor y sin angustia. Son hijos de Dios, Jesús los salvó con su sangre, son mis hermanos, están llamados a

Viernes de la 8va Semana durante el año

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    Lectura del libro del Eclesiástico 44, 1. 9-13   Elogiemos a los hombres ilustres,       a los antepasados de nuestra raza. Porque hay otros que cayeron en el olvido       y desaparecieron como si no hubieran existido; pasaron como si no hubieran nacido,       igual que  sus  hijos después de ellos. No sucede así con aquéllos, los hombres de bien,       cuyas obras de justicia no han sido olvidadas. Con su descendencia se perpetúa       la rica herencia que procede de ellos. Su descendencia fue fiel a las alianzas       y también sus nietos, gracias a ellos. Su descendencia permanecerá para siempre,       y su gloria no se extinguirá.   Palabra de Dios. Al final de su obra, el sabio invita a alabar a todos aquellos que han sabido vivir sabiamente, inculcando a sus hijos la sabiduría de vivir de acuerdo con la voluntad de Dios y su alianza. Por ellos se conserva su nombre, como signo de que Dios los ha amado (salmo responsorial), mientras que los que no han procedido así no son dign